Análisis de rendimiento del parche 1.08 para Homefront: The Revolution
Una mejora considerable.
Homefront: The Revolution, el ambicioso juego de Dambuster Studios (en lo técnico, al menos), sufría bastante en su forma original para consolas. Aunque era impresionante en lo visual, el frame-rate en ellas era muy inestable, con marcadas fluctuaciones que comprometían la experiencia. Cuando se trata de shooters en primera persona, funcionar a 30fps debería ser lo mínimo exigible. Si te quedas por debajo de los 20fps, tienes problemas.
Anteriormente ya hablamos de ciertos progresos realizados con la optimización de Homefront: The Revolution, con la que los desarrolladores fueron capaces de mejorar el rendimiento hasta un 25 por ciento con el parche 1.06. No obstante, a pesar de las mejoras prometidas, todavía estábamos lejos de lograr ese objetivo de 30fps. Hasta ahora.
El parche más reciente, el 1.08, realiza cambios más agresivos para mejorar el rendimiento, y las optimizaciones pertinentes se unen a ciertos downgrades muy bien elegidos, inteligentes, en el apartado visual. Antes de meternos de lleno en las mejoras del rendimiento, vamos a echar un vistazo a las principales diferencias que hemos visto en Homefront antes y después de la última actualización.
Para no alargarnos demasiado, aunque el grueso de los assets artísticos en Homefront se mantiene idéntico, está claro que Dambuster Studios ha retocado la forma en la que se aplican las luces y las sombras para acercarse al objetivo de los 30fps. Principalmente, la iluminación dinámica y las sombras de los objetos son los que se llevan la mayor parte, ya que se ha eliminado algo de profundidad y complejidad. No obstante, también se ha añadido un extraño efecto de tramado en algunas zonas, y aunque el resultado puede denotar diferencias dramáticas en las escenas cinemáticas, el aspecto general del gameplay permanece muy similar. También se han retocado efectos como grandes explosiones, que ahora muestran efectos de post-procesado más simples.
En lo que respecta a las diferencias entre Xbox One y PlayStation 4, siguen siendo similares a las anteriores versiones del juego. La plataforma de Microsft sigue renderizando a 900p, comparado con la presentación full HD de la edición de PlayStation 4. En la práctica, eso se traduce en nada más que un pequeño efecto blur adicional, y un toque más iridiscente. Xbox One también tiene efectos que sufren un ligero downgrade, como se puede ver en un efecto de profundidad de campo menos impresionante. En el lado bueno, no obstante, la plataforma de Microsoft sigue mostrando un rendimiento ligeramente superior a de la plataforma de Sony.
Y cuando echamos un ojo al rendimiento, no tiene nada que ver. Las escenas repletas de acción que podían suponer perfectamente una caída a los 20fps o más, ahora alcanzan sin problema los 30fps, o se quedan muy cerca en las áreas más intensas. PlayStation 4 en concreto puede tambalearse un poco, pero es una gran mejora en general. Para decirlo de forma clara, los truquitos y retoques estratégicos que solo tienen un ligero impacto en el apartado visual del juego, prueban tener un efecto impresionante a la hora de lograr un gameplay más fluido y receptivo.
En esencia, si dejasteis el juego por su pobre rendimiento, ahora es el momento de darle otra oportunidad, y no hace falta decir que si el título lleva un tiempo cogiendo polvo en al colección de vuestra estantería, recomendamos probarlo de nuevo. No son 30fps inmutables, pero se acerca mucho durante la mayor parte del juego, y eso representa una mejora de la calidad muy significativa a la hora de ponerse a los mandos, incluso aunque Dambuster Studios haya tenido que sacrificar algunos de los efectos visuales más exigentes.
Con ambas versiones una al lado de la otra, es relativamente fácil ver cómo la desarrolladora se las ha arreglado para mejorar el rendimiento, pero también sirve como clara demostración de cómo una ligera floritura visual puede resultar en un impacto grandioso en el rendimiento. Nos hemos divertido mucho más con el juego ahora que lo hemos vuelto a jugar con motivo de este análisis de rendimiento, simplemente porque no daba la sensación de que el motor gráfico estaba sufriendo. Y además de eso, aunque se han realizado muchos cambios en el aspecto visual, sigue siendo un juego impresionante en su apartado gráfico.