¿Qué tal es la versión para consolas de Shadow Warrior 2?
Un paso atrás respecto al PC.
Shadow Warrior 2, publicado el año pasado, sigue siendo uno de los shooters en primera persona con mejores gráficos en PC. Compatible con HDR y con un rendimiento impecable, el juego editado por Devolver Digital representa lo mejor de la plataforma en términos visuales. Ahora también puedes jugarlo en consola, pero la pregunta es... ¿deberías?
Teníamos muchas ganas de probar este port porque sus desarrolladores, Flying Wild Hog, hicieron un gran trabajo en 2014 al trasladar a consolas el primer Shadow Warrior. Tenía algunos defectos, como tearing en pantalla en determinados combates, pero aún así lograba ofrecer gráficos con la calidad de PC a 60FPS bastante estables. Esperábamos algo aún mejor con la secuela, pero tres años más tarde Shadow Warrior 2 parece más bien un paso atrás en ciertos aspectos.
Queremos dejar claro que sigue siendo un juego bastante bello (puede incluso que gráficamente sea uno de los mejores shooters del mercado), pero presenta varios problemas que evitan que alcance todo su potencial. El más evidente, comparado con su predecesor, es el frame-rate: con gráficos tan suntuosos no resulta sorprendente que se pierdan los 60FPS, pero tampoco deja de ser cierto que títulos como Doom o Battlefield 1 son igual de impresionantes -o más- y sí alcanzan ese frame-rate. Los desarrolladores, además, expresaron su intención de ir a por los 60FPS cuando me reuní con ellos en la Gamescom de 2015.
Sea como fuere, la realidad es que la versión final de Shadow Warrior 2 para consolas funciona a 30FPS. Aunque esto resulta decepcionante teniendo en cuenta lo bien que se juega en PC con el doble de frame-rate, al menos la implementación a 30FPS es sólida. Las caídas de frame-rate son virtualmente inexistentes tanto en PlayStation 4 como en Xbox One -aunque en la consola de Microsoft hay algo de tearing- y el frame-facing se adhiere escrupulosamente a esa cifra. Si a ello le sumamos un excelente efecto de motion blur, el juego logra mostrarse suave, aunque con la gran velocidad de la acción es claramente un paso atrás respecto a la versión de PC. Solo por el rendimiento ya recomendaríamos optar por la versión para ordenador.
Otras omisiones en la versión para consola son más raras. Por ejemplo, Shadow Warrior 2 fue uno de los primeros juegos de PC que añadieron compatibilidad con alto rango dinámico (HDR). Era espectacular, y sin duda una de las mejores implementaciones de esta tecnología del año pasado. Parecía evidente que esto llegaría también a consolas, pero en realidad desaparece por completo. Teniendo en cuenta que todas las consolas actuales -excepto la Xbox One original- son compatibles con HDR, esto es tremendamente decepcionante.
Y luego está la compatibilidad con PlayStation 4 Pro... o más bien la inexistente compatibilidad con la consola premium de Sony, porque la experiencia en Pro es exactamente igual que la que ofrece la PlayStation 4 estándar. Llevando seis meses en el mercado parece ridículo que un juego del nivel de Shadow Warrior 2 llegue a las tiendas sin incluir ningún tipo de función para PlayStation 4 Pro, lo mismo que ocurrió hace unas semanas con Prey.
Otros problemas no son tan centrales a la experiencia, pero parecen menos trabajados de lo esperable en una desarrolladora que siempre ha demostrado ser muy hábil en el plano técnico. La disparidad en la calidad de las texturas es un buen ejemplo de ello.
Aunque no podemos esperar que todas las texturas de mayor resolución de la versión para PC den el salto a las consolas, lo que tenemos aquí son texturas de calidad muy variable. En una zona puedes encontrarte con texturas muy trabajadas para el suelo, con ladrillos y parallax occlusion mapping. Sin embargo, te das la vuelta y te encuentras con texturas mucho peores, lo cual da el cante de forma negativa y no ocurre en el original de PC.
Eso no quiere decir que las texturas sean malas la mayor parte del tiempo, pero la extraña mezcla entre las de alta calidad y las de baja resulta sorprendente. También hemos notado un problema con la oclusión ambiental, tan densa que a menudo parece que haya una oscura nube negra alrededor de tus manos. Es una elección extraña, cuanto menos.
Flying Wild Hog ha demostrado en el pasado su maestría con la tecnología del PC y de las consolas, y os recomendamos echar un vistazo al vídeo que hay en esta página para ver lo similar que es el look al original de PC. Las zonas boscosas son ricas, con follaje que se mueve con el viento, mientras que las ciudades mojadas por la lluvia están repletas de reflejos y vibrantes luces de neón. El trabajo con la animación es por lo general excelente, y el modelado de las armas fantástico. El sutil efecto blur en el borde de las mismas, además, siempre se agradece. No tenemos duda, pues, de que Shadow Warrior 2 supone un importante avance respecto a su antecesor en lo que respecta a sus características visuales.
Quizás no alcance el nivel de la versión para PC cuando observas atentamente los detalles, pero la sensación general es que se queda muy cerca mientras juegas. En términos de resolución, nos encontramos con los típicos 1080p en PlayStation 4 y 900p en Xbox One - las mismas resoluciones que se usaron en el primer Shadow Warrior. También es positivo ver que el filtrado anisotrópico tiene un buen nivel en ambas máquinas.
Otra característica positiva digna de mención es el menú de opciones. El juego anterior fue uno de los primeros títulos para consola en ofrecer ajustes completos de profundidad de campo, y Shadow Warrior 2 mantiene esta tendencia. Además, también puedes activar o desactivar otros efectos gráficos, como aberración cromática o motion blur, aspectos visuales que algunos usuarios prefieren evitar. Tener este tipo de opciones en un juego de consola es genial, con lo cual es agradable verlos aquí.
Al final, lo bueno o malo que sea este port depende de tus expectativas y de tu hardware. Si tienes una Xbox One estándar o una PlayStation 4 conectada a un televisor 1080p, la mayor queja es el frame-rate, más bajo de lo que nos gustaría pero al menos muy consistente. Las texturas con menor resolución y los problemas de oclusión ambiental son visibles, pero no tan importantes.
Pero si tienes un televisor 4K con HDR o una PlayStation 4 Pro, Shadow Warrior 2 parece una oportunidad perdida. Viniendo de una versión para PC que tiene HDR, más resolución y mayor frame-rate, es un gran paso atrás. Y siendo los desarrolladores un estudio famoso por su habilidad técnica, sorprende que estas características desaparezcan.
La potencia adicional de PlayStation 4 Pro podría haberse utilizado para restaurar los 60FPS, pero la total ausencia de compatibilidad con la consola es sorprendente. Nada de esto implica que Shadow Warrior 2 sea un mal juego, porque no lo es, pero la experiencia es sencillamente mucho mejor en PC, así que, por ahora, esa versión sigue siendo la que recomendamos.
Traducción por Josep Maria Sempere.