Grand Theft Auto IV: The Lost and Damned
American Choppers.
Mientras probaba las nuevas opciones que nos trae el online de esta ampliación de GTA IV constaté un hecho que podría parecer anecdótico pero que creo que esconde una gran verdad: ¡los jugadores de GTA son los más genuinamente mal hablados de todo Xbox Live! La lección magistral de insultos (en inglés) a la que asistí no pueda igualarse a la de ninguna otra de las experiencias online que he tenido en mucho tiempo. Pero he de aclarar una cosa, con “insultos” no me estoy refiriendo a las sandeces que dicen esos cenutrios malhablados que exteriorizan sus emociones blasfemando contra todo lo que se mueve, todo lo contrario. Me refiero precisamente a esa especie de jerga propia de los entornos barriobajeros de las grandes ciudades de Estados Unidos, la misma con la que resuelven sus conversaciones los personajes de este juego, y que podría definirse como una elegante unión de fucks y sentencias contundentes. Esta pegadiza forma de hablar puramente norteamericana y que a la vez nos suena tantísimo de infinidad de películas es una de las marcas propias de la saga GTA. Estaba en la gloriosa cuarta entrega y obviamente también forma parte de este Lost and Damned.
Con hechos como este nuevamente se demuestra que Rockstar North lo ha conseguido. Ha logrado atraparnos dentro de unos ambientes y de unas atmósferas muy determinadas como son las del mundo del crimen y, tal como han demostrado tantas veces, controlan el tema al dedillo. En esta ocasión, sin embargo, la desarrolladora escocesa va un paso más allá y nos propone con este contenido descargable para GTA IV formar parte de lo que casi podríamos llamar una tribu urbana. Ya podéis iros olvidando de ese santurrón de Niko Bellic (o no), porque ahora encarnaremos a Johnny Klebitz, un motorista de la banda de los Lost, un tipo realmente duro que viste de cuero, que no se despega de su moto ni para ir al servicio y que encima está pasando un mal día. ¡Seremos un motero con malas pulgas!
Este es precisamente el planteamiento de Lost and Damned, hacernos sentir que formamos parte de una banda de "ángeles del infierno" que se divierte haciendo de las suyas aprovechando el mismo gran escenario de Liberty City de la aventura original. Podríamos pensar entonces que estamos ante el típico DLC que lo único que hace es introducir un nuevo personaje y unas pocas misiones nuevas, pero no es así. Los casi 2GB que ocupa en nuestro disco duro esta expansión y los señores 20 eurazos que nos costará ya nos hacen pensar que será algo más lo que nos encontremos detrás de la devaluada etiqueta de "contenido descargable".
Para empezar tenemos unas 10 horas más de argumento que a través de diferentes misiones vendrían a complementar todo lo explicado en el juego original. Cambian los personajes y la trama pero el tono serio de la historia y el estilo narrativo puramente cinematográfico son exactamente los mismos. Esto no es precisamente malo, no hay que olvidar que a día de hoy GTA es uno de los pilares fundamentales si hablamos de narración dentro de este sector. El guión de Dan Houser pone especial énfasis en las escenas de corte y vuelve a demostrar ser una proeza en lo que se refiere a narrativa. Como prueba de esto, podéis fijaros en aquellas personas que no tengan demasiado contacto con este medio; es muy difícil que no se queden asombradas al ver las imágenes de este juego. Y es que como resultado de un gran dominio del montaje y sin contar con el mejor motor gráfico GTA consigue transmitir una sensación de realismo apabullante en sus escenas.
No os revelaré ningún hecho crucial de la historia si os digo que en un momento dado, en una de estas escenas aparece un desnudo masculino frontal íntegro. Esto no debería representar motivo alguno de alarma, pero sin embargo me da la sensación de que, tal como dijo recientemente en una entrevista el productor y guionista del juego, Dan Houser, "nuestro medio es todavía muy joven, no es un bebé, pero probablemente siga siendo un niño". Estas declaraciones nos hacen pensar sobre el hecho de que los videojuegos conservan todavía algo de pudor en lo que se refiere a mostrar según que cosas en pantalla. Gracias a Rockstar y a su narrativa sobria y adulta al mismo tiempo parece que estas fronteras infranqueables son cada vez menores, y esto es algo que los que amamos el videojuego como medio de expresión debemos agradecer.
Como siempre, cabe destacar la construcción de los personajes, y es que podríamos decir que en este Lost and Damned se ha marcado un nuevo hito en cuanto a la veracidad de las "actuaciones" de esos esqueletos de polígonos que vemos en pantalla. No hablamos simplemente del protagonista, sino de todo el elenco de personajes, desde Ashley, nuestra compañera adicta a las drogas, hasta cualquiera de nuestros compañeros de la banda o de los personajes que nos irán dando misiones. Mención especial para Billy Grey, el jefe de la banda de la que formaremos parte y que a lo largo del juego se presentará como el gran rival de nuestro protagonista, convirtiéndose en un foco de tensión constante. Cabe destacar además que el argumento que nos encontraremos está cargado de referencias y guiños al título original, un detalle muy de agradecer y que podemos entender desde el momento en que sabemos que la mayoría de los que darán una oportunidad a esta expansión serán los mismo que en su momento jugaron a GTA IV.