Dark Souls 3 - Castillo de Lothric, Armadura Asesina de Dragones
Guía Dark Souls 3 - ¿Perdido por el Castillo de Lothric? Te echamos una mano para que acabes con la Armadura Asesina de Dragones sin (muchos) problemas.
Desde la hoguera de la capilla sube por las escaleras y adéntrate en la zona de delante para encontrar a un clérigo y un caballero. El clérigo curará al caballero durante la pelea, así que es buena idea interrumpirle inmediatamente y acabar con él lo antes posible para que derribar al caballero sea un poco más fácil.
Recoge las almas del altar y sube por las escaleras - aparecerá otro clérigo con un par de caballeros, así que de nuevo acaba primero con el clérigo. Intenta llevar la lucha a la parte inferior de las escaleras en lugar de la parte superior ya que hay otro clérigo y otro caballero más adelante, y se te acercas demasiado se unirán a esta bacanal de la destrucción.
Sigue adelante por el pasillo hasta la habitación de delante para encender la hoguera. El arco del otro lado te llevará de nuevo a la zona donde luchaste con el jefe, así que toma la otra salida por los escalones hasta llegar a otra habitación, saquea el cofre y sal al balcón.
La zona de delante está repleta de esqueletos y zombis, y les han metido un turbo desde la última vez que los vimos. Los más grandes pueden hacerte mucho daño, así que intenta evitarlos siempre - avanza poco a poco y procura acabar con ellos uno a uno si puedes.
Hay unos cuantos enemigos repartidos por las zonas inferiores, pero el camino generalmente sigue lentamente en el sentido de las agujas del reloj contra la marea de enemigos. Eventualmente encontrarás otra hoguera.
Enciéndela y sube por los escalones de delante hacia el dragón que dormita. A medida que te acerques al puente de piedra aparecerá otro, así que retírate y deja que se enfrenten.
Cuando no haya moros en la costa ve hacia el edificio de delante para encararte a más caballeros y clérigos, y como antes, lidia con los segundos lo antes posibles para evitar que la lucha se alargue demasiado. Sube por las escaleras y síguelas a la izquierda hasta que vuelvas a salir fuera.
En la zona de tu izquierda hay un ascensor que habilitará un atajo a una hoguera anterior, así que desciende y luego cruza la niebla de la puerta para enfrentarte al jefe final.
En la siguiente página explicamos cómo superar el Lago Ardiente y el jefe final Viejo Rey Consumido.
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Cómo matar a la Armadura Asesina de Dragones
Este tipo es muy grande y se mueve muy despacio, pero sus ataques son rápidos y brutales. En la primera fase su golpe sobre la cabeza es el mayor problema, y si te pilla puede ser el final de la lucha. Por suerte tarda algo de tiempo, así que en cuanto veas que eleva su arma sobre su cabeza, empieza a retirarte.
Como con la mayor parte de las luchas atácale un par de veces mientras se recupera y luego retírate a una distancia prudencial. Si usas un escudo con un cien por cien de resistencia física y un porcentaje alto de estabilidad, podrás bloquear muchos de sus ataques normales, pero mejor que evites su carga con el escudo, ya que te quitará mucha stamina.
Cuando su salud esté al cincuenta por ciento no solo sus ataques de dañarán más, sino que también deberás tener cuidado con unos cuantos problemas adicionales. Primero los ataques con proyectiles de las extrañas apariciones que flotan en la distancia; no te harán mucho daño, pero pueden aturdirte y dejarte vendido para que te ataque el jefe.
Segundo, su arma puede dañar las verjas del puente, así que está también ese peligro añadido.
En los últimos compases usará otro ataque totalmente nuevo. Cuando veas que sujeta su arma con dos manos y se acerca hacia ti, retírate lo más rápido que puedas, ya que es un ataque rápido que te lanzará un torrente de aire y te quitará buena parte de vida.
Cuando esté muerto enciende la hoguera y dirígete al Santuario.