Dark Souls 3 - Lago Ardiente y jefe final Viejo Rey Demonio
Guía Dark Souls 3 - No dejes que el Lago Ardiente te intimide: te contamos cómo superarlo y matar al Viejo Rey Demonio.
Hay cinco jefes finales opcionales, y aunque puedes enfrentarte a uno justo después de las Catacumbas de Carthus, para los otros dos es necesario que mates a todos los Señores de la Ceniza, así que déjalo por ahora. (Además, como nos estamos acercando al enfrentamiento final se va a volver todo un poco más duro, así que está bien tener algo más fácil con lo que relajarse.)
Desde la hoguera del Gran Señor Wolnir vuelve al puente de madera. Golpea uno de los postes para derribarlo, y luego acércate al borde para usarlo como una escalera.
Avanza por la cueva y enfréntate al gran demonio de fuego - tiene una espada de fuego y unos cuantos ataques potentes, pero situarte tras él es relativamente seguro - todo lo seguro que puede ser tocar la moral de un demonio de fuego, claro.
Cuando acabes con él sigue por los escalones hasta el nivel inferior; hay unos cuantos esqueletos en esta zona, y el equipo del Viejo Sabio está repartido entre varios cuerpos aquí y en el túnel de más adelante, así que recógelo mientras luchas y enciende la hoguera en la siguiente habitación.
Desciende por el túnel de delante hasta que llegues al agua. Es una zona bastante grande con un montón de cosas por hacer, pero si simplemente quieres acabar con el jefe, gira a la izquierda, esquiva al gusano y adéntrate en la niebla.
Si, por el contrario, prefieres aventurarte un poco más, gira a la derecha en la orilla y avanza por ahí.
Explorar el lago
Alguien te está disparando flechas, así que mantente tras una cobertura siempre que te sea posible, y vigila con los cangrejos gigantes. Sigue el filo del agua hacia un pequeño túnel. Encontrarás dos insectos gema, y es posible que también a un espíritu invocado en la siguiente habitación.
Vuelve al lago principal y sigue adelante. A medida que te acerques al otro lado verás algo que sale de la superficie del agua, y cuando te acerques aparecerá una lanza y caerás en un agujero. Cuando aterrices gira a la izquierda, mata al enemigo en el cruce con forma de T y ve a la izquierda de nuevo para encontrar otra hoguera.
Baja por las escaleras al otro lado de la habitación, gira a la derecha al final y recoge el objeto en el pasillo antes de atravesar las dos siguientes estancias y acabar con las bestias que patrullan por ahí.
Cuando llegues al cruce con forma de T, gira a la izquierda y da una voltereta en el muro para que aparezca una zona secreta - hay un caballero ahí apalizando a otro enemigo, así que corre rápidamente y atácalo mientras todavía está distraído. Cuando acabes registra el cuerpo.
Al otro final del túnel hay una habitación más grande llena de bolas de fuego flotantes y demonios. Las bolas de fuego actúan como una suerte de sistema de alerta de intrusos, y una vez te detectan las cosas pueden ponerse bastante feas. La salida de la habitación está bajando un pequeño tramo de escaleras en un arco a la izquierda de la entrada, pero hay un Fragmento de hueso de no muerto en un cuerpo a la izquierda, por si lo quieres recoger.
Avanza por las alcantarillas - por ahí andan las típicas ratas gigantes y las ranas venenosas, cómo no - hasta que emerjas en una cámara alta con un puente de piedra largo y estrecho. Avanza por él y mata al caballero, llevándolo a la siguiente estancia si es posible para evitar males mayores, y sube por las escaleras hasta que salgas de nuevo al lago.
Sigue el camino subiendo la cuesta para acabar con un puñado de esqueletos hasta que llegues a la balista, y desactívala.
Desciende al lago y ve en dirección al gusano gigante. Impone bastante, pero si te sitúas en la posición correcta es bastante simple de vencer: mantente entre él y la puerta con niebla y espera a que realice su ataque en el que gira en círculos. Cuando se detenga para recuperarse, corre y golpéale unas cuantas veces y luego retírate de nuevo antes de que se mueva otra vez. Si te da no te hará mucho daño, pero es mejor que lo evites.
Cuando acabes con él atraviesa la niebla para acabar con el jefe.
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Cómo matar al Viejo Rey Demonio
Vas a necesitar toda la resistencia al fuego que puedas, así que equípate con la mejor armadura - la resistencia física es un plus, pero evitar que te dé es de hecho mucho más fácil que evitar el fuego.
Esta es una lucha que sin duda hay que tomarse con calma; ataca únicamente cuando estés seguro de que no estás en peligro. Hay unas cuantas zonas del escenario en las que puedes refugiarte, y aunque no te protegen del todo deberían ofrecerte unos segundos de respiro si necesitas curarte.
En la primera fase se ciñe principalmente a mover su garrote en un gran arco o a saltar hacia ti, siguiendo cada ataque de una potente exhalación de fuego. Esquiva hacia atrás para evitar los barridos, y cuando realice su ataque con salto da una voltereta hacia él - deberías acabar entre sus piernas y tener tiempo de golpearle un par de veces antes de volver a retirarte dando unas volteretas para evitar su contraataque.