Guía Dragon Quest IX

2.4 Temporada de Yggos

En el nombre del Abad

Para continuar con nuestra aventura nos dirigiremos ahora al norte. Allí nos encontraremos con la Abadía Vocationis, sitio famoso por ser el destino de peregrinación de todo aquel que quiera cambiar su vocación. Cuando entremos, nos percataremos de que se encuentran en problemas, ya que el Abad Andosin, - encargado de cambiar las vocaciones- ha desaparecido sin dejar rastro. Nos encontramos en la primera planta de la abadía, donde veremos a otro abad. Si hablamos con él nos dirá que la última vez que vio a Andosin fue cuando, un visitante le dio un extraño fruto dorado como recompensa por sus servicios. También nos dirá que ese visitante se encuentra aun en la abadía. Así que para tener más información debemos bajar a la planta baja del templo, a través de las escaleras que encontraremos en la parte derecha del vestíbulo de la planta donde nos encontramos.

En la planta baja de la abadía, encontraremos una posada y a un personaje que nos venderá artículos con los que podemos reabastecernos o equiparnos. Si hablamos con los personajes que se encuentran en este nivel nos dirán que vieron como el Abad Andosin se comía el fruto dorado. También nos encontraremos con la persona que se lo regalo y nos contará que lo encontró en el camino y pensó que sería un buen regalo, ya que al abad le encanta la fruta. Si seguimos explorando la planta baja de la abadía, en la posada, encontraremos unas librerías en las que obtendremos las recetas alquímicas de: escudo de acero, yelmo de acero, armadura compacta, guanteletes de acero, rotulas de acero, escarpes de acero, espada de acero, lanza de acero, látigo de acero, barra de acero, garras duras y abanico de acero. Después de recoger estas recetas, volved a la planta de arriba y contadle al abad regente lo que habéis averiguado. Al hacerlo, os dirá que posiblemente Andosin, envalentonado por la influencia del fruto dorado, haya ido a investigar la Torre Vocacional. Este edificio, en el este del mapa, es donde se hacía en la antigüedad el ritual del cambio de vocación. Ahora está infestado de monstruos. Tras explicarnos esto, el abad nos pedirá que vayamos a buscar a su compañero. Naturalmente aceptaremos la petición, y al hacerlo el clérigo nos dirá que para poder entrar a la torre debemos hacer un Reverencia, gesto que nos enseñara al momento.

Una vez estemos fuera de la Abadía Vocationis nos dirigiremos hacia el este. Cuando lleguemos veremos las puertas de la Torre Vocacional cerradas a cal y canto. Es el momento de situaros delante de ellas y hacer una "Reverencia". Al momento las puertas se os abrirán de par en par y podréis entrar dentro del edificio. Pero antes conviene que sepáis que la fauna monstruosa que os espera en el interior, está formada por: Zombis errantes, Malandriles, Setas mágicas, Jinetes de limo, Tunantes, Dracaninas, Armaduras inquietas y Medulinos cicatrizantes. Una vez dentro, en la primera planta no hay nada que destaca. En las esquinas de la parte norte de la sala tenéis unas escaleras que suben al siguiente nivel. Da igual por cual subáis, ya que las dos llevan hasta el mismo sitio. Cuando os encontréis en la segunda planta de la torre, explorando un poco encontrareis tres cofres que contienen ítems aleatorios. Tras recogerlos podéis subir a la tercera planta por las escaleras que encontrareis en el centro de la sala donde estáis. En la tercera planta, aparte de más monstruos, encontrasteis un cofre con una minimedalla. Si seguís el rumbo que marcan los pasillos llegareis hasta las escaleras que llevan a la cuarta planta. La exploración de este nivel de la torre os hará encontrar tres cofres que contienen: 1200 monedas de oro, un fragmento de mineral de hierro y un ítem aleatorio. Cerca del cofre donde habéis hallado el ítem aleatorio podréis ver las escaleras que llevan al quinto nivel de la torre. Aquí solo encontrareis un cofre con unos guantes de hierro. En las esquinas de la sala veréis unas puertas detrás de las cuales suele haber barriles con ítems aleatorios. Sin más que ver aquí, podéis subir la escalera para llegar a la sexta planta. En esta planta no hay nada que destacar así que seguid con vuestro camino y dirigíos a las escaleras de la séptima planta. Esta es la última planta de la Torre Vocacional. En ella hallareis dos cofres cuyo contenido es: una minimedalla y una ampolla de agua mágica. También veréis una puerta dorada. Antes de atravesarla os recomiendo que os curéis, porque nunca se sabe quien aguarda al otro lado.

Cuando atravesemos la puerta dorada llegaremos a una sala donde veremos al abad Andosin, realizando un ritual, pero en mitad del proceso algo saldré mal y el clérigo se verá envuelto por las tinieblas. Tras la onda expansiva que generará el ritual, veremos que el abad se ha transformado en Célula un monstruo que se hace llamar Andosiniestro, (debería sonar ahora el redoble para cómicos), con siniestras intenciones, entra las cuales se encuentra la de probar sus nuevos poderes con nosotros.

Vencer a este Jefe no será muy difícil pero requiere seguir unas pautas. Andosiniestro, usa ataques que dañan a todos los miembros del grupo. Así que curaos siempre que vuestra salud se acerque a la mitad. Usad hechizos para fortalecer vuestras defensas y lanzadle hechizos como "Helada" y golpes físicos. Manteniendo estas premisas pronto conseguiréis vencerle. Cuando acabe la batalla veréis como el abad vuelve a la normalidad. No recordara nada de lo sucedido y volverá a la Abadía Vocationis, dejando tras de sí el Yggo número 2. Cuando lo hayáis recogido, volved a la abadía.

De vuelta en la abadía, ve hacia la parte norte de la primera planta. Allí te encontraras con el Abad Andosin, que te agradecerá lo que hicisteis por él en la Torre Vocacional y te desbloquear la posibilidad de cambiar de vocación. Antes de cambiar de vocación, os recomiendo que habléis con las personas de que hay por la abadía, ya que os darán consejos y advertencia que debéis tener en cuenta antes de cambiar de vocación. También al hablar con algunos de ellos obtendréis las misiones secundarias: 095, 101, 103 y 109. Y así concluye vuestra misión en la Abadía de Vocationis.