Los Cazafantasmas: El Videojuego
Sueño cumplido.
Como hemos dicho la ambientación es la clave. Podríamos criticarle que se fundamenta demasiado en lo que ya pudimos ver en las películas, pero lo cierto es que esto es lo que la mayoría hemos esperado siempre de un juego de los Cazafantasmas. Los que mejor conozcan las películas disfrutarán descubriendo la gran cantidad de guiños que constantemente se nos aparecen. Pero de todas maneras, con mucha probabilidad lo que más ilusionará a los seguidores de estas películas será la posibilidad de visitar el cuartel general de Los Cazafantasmas. Después de las misiones, se nos da la posibilidad de darnos unas vueltas por él. Es exactamente igual a como lo habíamos imaginado, con Moquetes encerrado para que no de la vara, con la secretaria atendiendo al teléfono con su conocido tono de voz, el piso inferior donde se encuentra el mecanismo donde se encierran los fantasmas, las habitaciones, etc. Además, mientras nos movemos por este entorno, los distintos personajes van realizando diferentes acciones que haría cada uno de acuerdo con su personalidad. Me encantaría poderos explicar todos esos pequeños detalles pero no queremos estropearos la sorpresa de descubrirlos por vosotros mismos.
La música —compuesta por Elmer Bernstein— es la misma que la de la película y acompaña perfectamente las escenas. No es muy variada y a veces puede hacerse repetitiva. Además, el mítico tema principal de Ray Parker Jr. suena menos de lo que quisiéramos durante el juego.
El personaje que el jugador controla ha sido privado de todo tipo de personalidad para dar toda la importancia a los carismáticos protagonistas. Así, como si fuera Link, el protagonista de Zelda, en ningún momento dice nada ni muestra muchas emociones. Sin duda una decisión acertada que consigue que vivamos el juego como si fuera una experiencia cinematográfica interactiva, pudiéndonos mover a nuestro gusto por las escenas mientras se desarrollan los hechos. Al contrario de lo que piensan algunos sobre este tipo de opciones, a nivel narrativo funciona a la perfección.
Para acabar de rizar el rizo el doblaje al castellano es muy bueno y se nota que sus responsables han procurado contar con los mismos actores que hace un par de décadas pusieron su voz a los mismos personajes. Escuchar como Egon, con su característica voz de siempre, nos explica nuestra próxima misión antes de salir pitando es todo un goce para el fan de los Cazafantasmas. Lástima eso sí que los diálogos en castellano no estén perfectamente sincronizados, pero es algo que tampoco nos molestará mucho. Los más puristas de la versión original tampoco se sentirán defraudados porque tienen la opción de elegir las voces originales —que son las de los actores que participaron en la película— en inglés, así todos contentos.
“¡Oh Dios, cuántos mocos negros!”.- Ray Stantz
El juego se estructura en seis capítulos que tienen lugar en diferentes escenarios muy bien diferenciados (excepto uno que es claramente de relleno y que es el mayor lastre del juego). Nos moveremos en la ciudad, en el mundo de los fantasmas, en viejas bibliotecas, en hoteles... En cada una de estas misiones nuestro objetivo será básicamente avanzar a la vez que capturamos a todos los fantasmas; ésta es la mecánica básica que nos mantendrá ocupados la mayor parte del tiempo. A menudo nos encontraremos algún pequeño rompecabezas, pero en ocasiones muy contadas porque Los Cazafantasmas: El Videojuego es eminentemente un título de acción.
La gran influencia que Gears of War en el género de los juegos de acción durante esta generación vuelve a hacer acto de presencia como muchas otras veces en los últimos años. Así, este título adopta muchos de sus elementos característicos. En primer lugar su característica perspectiva desde la espalda, pero también la forma de movernos por los escenarios y finalmente el planteamiento de trabajo en equipo del título de Epic. No hay que olvidar que no estamos solos, somos un equipo y debemos trabajar como tal. Así, deberemos preocuparnos de reanimar a nuestros compañeros caídos ya que sobrevivir por sí solos a todos los fantasmas es muy difícil.
Se agradece en este sentido que la inteligencia artificial esté tan bien trabajada. Nuestros compañeros no son un estorbo como en muchos juegos de este estilo, todo lo contrario. ¡Son unos cracks! Desde luego, no serán pocas la veces que te salven la vida, aunque ten en cuenta que también caerán bastante fácilmente. No creas que van a ponértelo todo fácil. Además, como divertido recurso que da lugar a bastantes chistes, verás que tienen la divertida y cruel costumbre de ponerte a prueba en todo tipo de misiones que ellos no se atreverían a afrontar. Como aprendizaje, claro está.