NBA 2K10

Cuando uno es tan terriblemente superior en su género es normal ver cierto relajamiento. Cualquier equipo que haya sido campeón durante varias temporadas, en cualquier deporte, corre el serio peligro de empezar un suave y lento declive que permitirá a otros, más motivados, arrebatarles el primer puesto.

NBA 2K10 sigue siendo el campeón, el mejor juego de baloncesto que existe, de esto no hay duda. Y si te gusta este deporte está claro que tienes que ponerte las zapatillas, apagar el ordenador e ir a la tienda para comprarlo (¿sigues ahí? Bueno, yo continúo). Sin embargo el producto que encontraréis, y con el que seguro disfrutaréis, empieza a sufrir los primeros síntomas de una borrachera de éxito.

A nivel visual los cambios son poco relevantes. La proporción de los jugadores es más correcta —antes daba la sensación de que eran demasiado grandes— y su constitución física ha mejorado. Ya no tienen ni brazos delgaditos ni cuerpos raros. Las animaciones, como siempre, siguen en su línea ascendente. Se han añadido unas cuantas y se han mejorado las que había. Hay nuevos mates, nuevos rectificados —que se ejecutan con el stick derecho una vez se ha iniciado el mate original— y, desgraciadamente, poquitas fintas nuevas. Estas, además, no salen tan naturales como en NBA 2K9; en esta ocasión deberemos utilizar los dos gatillos para enlazarlas. Las fintas bajo el poste o de salida también se ejecutan de otra manera, con el gatillo izquierdo, pero básicamente nada ha cambiado.

Lo más significativo quizás sea el sistema de cansancio, que ahora se representa mediante un par de barras. Una, la verde, se repone poco a poco e identifica los esfuerzos explosivos de los deportistas, como sprints o movimientos de desgaste. La otra, amarilla, es el cansancio total del partido. Debemos gestionar bien las energías para no acabar tumbados en la banda medio muertos.

El sistema de defensa también se ha modificado ligeramente y se ha vuelto algo más estático y de posición; apretando el gatillo izquierdo defenderemos nuestra zona, aunque también deberemos seguir a nuestro par para que no se nos escape a la mínima. La IA juega un buen partido y sigue en la misma línea de los visto en la saga; no hay nada especialmente mal hecho que llame tanto la atención como para influir negativamente en la experiencia de juego, al contrario, hay bastantes destellos de mimo y calidad.

A primera vista todo parece simple pero… ¡hace falta un tutorial! Se hubiese agradecido alguna explicación para acostumbrarnos y entender esos cambios.