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Project Natal presentado en Madrid

Impresiones tras nuestra segunda partida.

¡¡Natal ya está entre nosotros!! Bueno, quizás es una forma un poco exagerada de decirlo, de hecho no saldrá a la venta hasta finales de año. En cualquier caso, lo que sí es cierto es que durante los dos últimos días Microsoft ha estado mostrando su revolucionario dispositivo en Madrid, en un evento que ha servido para presentar esta nueva tecnología por primera vez en nuestro país. Nosotros hemos estado allí para verlo y jugarlo así que atentos que aquí van nuestras impresiones.

De hecho, no es la primera vez que lo probamos, Xavi ya nos explicó sus experiencias tras catarlo en el E3, así que hemos visitado el ShowRoom de Microsoft con los deberes más que hechos. Es por eso que quizás nos haya decepcionado un poco no ver nada realmente nuevo ni probar tan siquiera una demo distinta de las que pudimos ver durante el pasado E3. De todas maneras, no podemos decirle que no a algo tan esperado como el nuevo sistema de detección de movimientos de Xbox 360, como tampoco a la amable invitación de la compañía para que todos los medios pudiéramos verlo, y ya que un servidor no lo había probado pues mejor todavía.

Después de las presentaciones pertinentes y antes de enfrentarnos a los no-mandos de Natal nos han vuelto a pasar el tráiler que sirvió como revelación de este invento durante la gloriosa conferencia de Microsoft en el pasado E3. Acabado el vídeo, se suceden los diferentes discursos y los representantes de la compañía ponen en relieve conceptos abstractos y palabras pomposas como futuro, magia, "cruzar el umbral de Natal"; y todo esto mezclado con una filosofía que casi podríamos definir como zen. Me explico, que si comunicarnos con él, que Natal se comunique con nosotros, que si Molyneux y las emociones. En fin, bonitas palabras que no digo que vayan desencaminadas de lo que realmente es Natal, pero que solamente son palabras. Hay que ponerse frente a la cámara de Natal.

Microsoft nos ha pedido que no sacaramos fotos del nuevo diseño del sensor de Natal ni del juego porque todavía no son los definitivos. Tanto el juego como el sensor se veían distintos que en el E3.

Lamentablemente la compañía solamente ha enseñado una sencilla demostración jugable en su presentación en Madrid, algo que seguramente habrá decepcionado a los que esperaban probar este periférico en algo "más serio" como ya se vio con la demo técnica de Burnout que os describíamos en nuestras primeras impresiones. De todas maneras la demo mostrada, llamada Ricochet, ya nos sirve comprobar en primera persona la detección de movimientos.

Ya podéis olvidaros de este diseño porque el sensor de Natal que saldrá a la venta a finales de año será distinto, el que tenían en Madrid era blanco y poco más grandote.

Lo primero que me llama la atención al ponerme frente a Natal es encontrarme ante la disyuntiva de que por primera vez no tengo un botón que pulsar o una palanca para seleccionar lo que quiero hacer. Talmente como si fuera Tom Cruise en la película Minority Report debo guiarme por los menús del juego con los movimientos de mis manos y brazos. Sorprendentemente la consola detecta a la primera el movimiento que realizo en el aire y ni tan siquiera la presión de encontrarme rodeado de gente mirando lo que hago me hace dudar de que debo mover el brazo hacia esa dirección para seleccionar que empiece la partida. Mi primer contacto es puramente intuitivo y la cosa funciona.