Red Dead Redemption
Vaquero melancólico.
Tal como hemos apuntado al inicio de este artículo, a nivel argumental Red Dead Redemption no es tanto un western crepuscular como se suele decir sino más bien el advenimiento de una nueva era. No lo parece, pero son dos cosas diferentes. El asombroso epílogo del juego es algo que refuerza esta idea. Igualmente, a lo largo de la aventura también se pone de relieve el tono melancólico que se le ha imprimido a la historia. Solamente con esa redención que se hace patente en el título ya podemos hacernos una idea de por donde van a ir los tiros. A nivel de guión nuevamente reconocemos el estilo inconfundible de Rockstar y que simplificando al máximo podríamos traducir en una historia en la que excepto el protagonista todo el mundo está loco.
La América más desquiciada y su sueño eterno vuelven a estar presentes en diálogos geniales que vuelven a elevar el videojuego a la altura de otras formas de expresión que gozan de más prestigio en este sentido. Por su parte los personajes están muy bien desarrollados y gozan de un gran carisma. Quizás, siendo muy tiquismiquis podríamos deciros que no llegan al nivel de los de GTA IV, pero es que aquella amalgama de personajes encabezada por Roman Bellic era tan delirante como difícil de superar. En cualquier caso, los personajes de RDR están a la altura, y si en algún momento cojea en este sentido John Marston viene al rescate.
El protagonista es clave en todo el desarrollo y sin duda uno de los pilares de este título. Humilde pero salvaje a la vez que nostálgico y con un pasado del que no puede desprenderse. John Marston consigue captar rápidamente nuestra atención y destaca por su manera de ser, muy diferente en algunos aspectos a la de otros personajes de la saga GTA. Algo tan sencillo como su educación, la forma de hablar tan propia de su tiempo, los gestos de cortesía con el sombrero, son pequeños detalles que aportan mucho más que mil lineas de diálogo. Al mismo tiempo el objetivo de su misión y motor del argumento convierten a Marston en un personaje que ya se ha ganado un lugar entre los grandes del videojuego.
Por otro lado, los amantes de las películas del género, ya sean desde la vertiente clásica de los filmes de Ford o Zinnemann, hasta los spaguetti-western de Leone o Corbucci lo pasarán en grande gracias a las referencias en forma de lugares, personajes, etc. Pero hay que destacar que más que basarse en las películas clásicas, Red Dead Redemption es más cercano a las nuevas producciones que han marcado el resurgir del género, desde series como Deadwood hasta películas recientes como la última versión de "El Tren de las 3:10". Podéis conocer algunas de las principales influencias del juego en este enlace. Resulta curioso también el hecho de que cada una de las áreas de RDR podría coincidir con los diferentes sub-géneros del western, así que os tocará estar atentos.
Fruto de estas influencias más cercanas en el tiempo encontramos una banda sonora que destaca por su sobriedad. De la misma forma que Red Dead Redemption pasa por alto el lado más ridículo y guasón de las películas del género (léase la típica pelea multitudinarias de Saloon) también hace lo propio con la banda sonora. En este caso, encontramos un acompañamiento musical muy sutil y con unas melodías cargadas de cierta melancolía lejana y toques de misterio. En contadas ocasiones se muestra arrolladora ni suena al tópico estilo Morricone, cosa que la distancia de las referencias clásicas y le da mucha más personalidad.