Wanted: Weapons of Fate
Un juego con curvas.
Estoy seguro que a todos os picó la curiosidad este juego cuando visteis los primeros vídeos que se enseñaron. Podíamos intuir que este juego en tercera persona añadiría varios giros de tuerca al género; la duda era si funcionarían.
Antes que nada, pongámonos en antecedentes. El juego empieza cinco horas después del final de la película de Wanted (inspirada en los geniales cómics de Mark Millar). Por si no la visteis, contaba la historia de Wesley Gibson (James McAvoy), un trabajador envuelto en la mediocridad que veía como su vida cambiaba de un día para otro. Una sociedad secreta de asesinos lo reclutaba y le decía que por sus venas corría la sangre de los auténticos maestros de la muerte. Esto, tras un duro entrenamiento, le permitía hacer cosas súper molonas como curvar balas, ligarse a Angelina Jolie (que no aparece en el juego, por cierto) y vacilar a Morgan Freeman.
La sociedad secreta, por cierto, se guiaba por los extraños dictados que emitía… un telar (una máquina para coser). Sí, suena algo extraño y hasta ridículo, pero de alguna forma llegan a justificarlo. En resumen, el filme dirigido por Timur Bekmambetov quizás no fuese una obra maestra en cuanto a guión —de hecho era más bien flojito e incluso el mensaje era algo escandaloso— pero sí que era una buena película de acción. Y eso es lo que un buen videojuego de este género necesita. Acción.
Como decíamos, comenzamos cinco horas después del final de la peli con nuestro protagonista intentando descubrir algo más sobre el asesinato de su madre y persiguiendo a The Inmortal, el archi malo. El juego pretende seguir una línea argumental que mezcla flashbacks en los que controlamos, también, al padre de Wesley. Desgraciadamente la forma en la que está narrado impide que consigamos enterarnos de la misa la mitad. Nos bombardean cada dos por tres con escenas cinemáticas (que son vídeos comprimidos en una calidad muy baja, y es bastante molesto) muy liosas y que confunden más que ayudan. Pasan del presente al pasado sin ton ni son. Total, que me costaba averiguar qué demonios estaba pasando. Y cortan el ritmo de juego que no veas. Al final he decidido que lo mejor era desistir y centrarme en los tiros. Y ahí es donde Wanted sobresale.
La mecánica de juego, para que os hagáis una idea, es muy similar a la de otros shooters en tercera persona como Gears of War. Avanzar, cubrirse, sacar la cabeza para disparar, flanquear, tiempo bala….
Todo esto lo ejecuta a la perfección. La forma de movernos de cobertura en cobertura es excelente y notamos que vamos adquiriendo ritmo a medida que avanzamos en el juego. Además, si lo hacemos rápido y bien, eso nos permitirá coger desprevenidos a los enemigos y acabar con ellos de forma rápida. O acercarnos y matarlos en un sangriento cuerpo a cuerpo en los que vemos unas cuantas animaciones la mar de majas (aunque no hubiese hecho daño poner unas cuantas más). También es posible aprovecharnos del entorno y disparar a barriles inflamables o a extintores, que producen efectos devastadores, especialmente en la pantalla del avión, que revientan las puertas y echa fuera a los enemigos.
Además de todo esto Wanted incorpora una novedad que le sienta muy bien: el disparo curvado. Como en la película, nuestro asesino puede darle efecto a los proyectiles de su pistola e impactar en los enemigos que están cubiertos. Para disparar así sólo tenemos que pulsar el botón superior derecho y mover una línea curva que sale en pantalla. Una silueta roja nos indicará dónde están los enemigos a cubierto. Cuando se ponga blanca… ¡bam! Si tenemos suerte hasta saldrá una cámara que sigue la trayectoria de la bala y nos enseña cómo impacta. Es espectacular, rápido y divertido, y gracias a la variedad de enemigos no es una técnica absolutamente infalible de esas que arruinan el juego. Se ha integrado bien y eso tiene mérito. Le da personalidad al juego.