Test de hardware: PS3 Slim
Análisis a fondo... y desmontando mitos.
Aquí estoy, emocionado, y no sólo porque tenga un nuevo cacharro que diseccionar. Cuando Sony rediseña su hardware, tiende a ir un poquito más lejos. No se trata sólo una reducción de costes, sino de hacer que el nuevo aparato, y por ende la marca, sea más atractivo y "molón". La PSOne y la PS2 Slim cumplieron con creces, y ¿quién puede olvidar la PSP-2000? Más pequeña, más fina, obviamente algo más barata en términos de calidad de construcción pero con más RAM y nuevas funcionalidades, como la útil salida de televsión. ¿Ha estado Sony a la altura con la nueva PlayStation 3?
Con PS3 Slim, la apuesta es mucho más alta. La que antes era la marca de videojuegos número uno ahora está bajo la intensa presión de Xbox 360, y al mismo tiempo los esfuerzos de Microsoft y Sony se han visto superados (y en mucho) por la Wii de Nintendo. Rebobina tres años atrás: ¿alguien hubiese apostado a que Sony estaría en la última posición en la carrera de las consolas en este momento de su ciclo vital? ¿podía alguien imaginar que Sony sería superada en términos de innovación en juegos, precios y exclusivas?
La misión de PS3 Slim es realmente complicada. Debe mantener los elementos de calidad premium de su antecesora y debe continuar justificando de forma física que es la consola más cara del mercado, pero al mismo tiempo debe conseguirlo siendo más barata de producir. La buena noticia es que en todos los aspectos, con sólo un par de excepciones, diría que este es un caso de "misión cumplida".
Así que lo primero es lo primero: el desembalaje. Los contenidos de la caja son sorprendentemente minimalistas. Cuando abres la caja de tu Xbox 360 Elite te encuentras ante varias bolsas con extras, compartimentos separados y la percepción general de que has comprado algo más que una consola. En cambio, la caja de PS3 Slim se limita a contener la consola, un pequeño y delgado manual, los cables de corriente y USB y, horror de horrores, un cable de vídeo compuesto con un adaptador SCART. Sí, el mismo cable que venía con la primera PlayStation 3... como si lo de la televisión de alta definición fuese algo que jamás ha ocurrido.
Si cualquiera puede encontrar un cable HDMI capaz de emitir señal a 1080p por unos pocos pavos en eBay, estoy segurísimo de que Sony al hacer una compra de millones de unidades puede conseguir un trato aún mejor. Un cable por componentes que ofrece el doble de calidad que un cable compuesto (como el de Xbox 360) tampoco hubiese supuesto un sobrecoste brutal. Lo cierto es que la alta definición no debería ser aquí un extra, debería ser uno de los pilares básicos de PS3. Tendría que venir de serie. Por razones similares, que Microsoft haya retirado el cable HDMI del packaging del modelo Elite de 360 también es digno de un lunático.
Una vez hablado de eso, ya es hora de hablar de la consola en si. Me gusta. El antiguo diseño de PS3 era acertado para su tiempo, y la Slim me parece adecuada como sucesora natural - más funcional, menos vistosa. Puesta al lado de la antigua PS3 en vertical, tiene casi la misma profundidad, pero es obviamente más fina y unos cinco centímetros más corta. Nunca me gustaron los botones de encendido y expulsión de disco sensibles al tacto de la PS3 original: siempre había la sensación de que eran un puro reclamo estético - con la Slim tienes unos botones "de verdad" de buena calidad. Táctiles, con buena respuesta y bien montados. Resumiendo, más barata pero mejor.
Puertos y conexiones: mirando la parte trasera de la consola vemos el típico conector LAN, HDMI, Toslink (cable óptico) y el puerto PlayStation AV, así como un pequeño conector de dos pins para el cable de alimentación, que sustituye al más grande que llevaba el modelo antiguo. El frontal ofrece dos puertos USB y una pequeña ranura oculta para el disco duro. Cambiar el disco duro de dos pulgadas y media (habitual en ordenadores portátiles) es realmente simple. Un compartimento en la parte inferior de la consola esconde un tornillo azul, que al quitarse permite extraer la bandeja del disco duro. Cambia los discos y ya está listo: todo lo que necesitas es un destornillador de estándar de estrella.
Quizás lo más sorprendente del nuevo formato de PS3 Slim es que confirma que todas las filtraciones de hace meses eran reales. El packaging es el mismo, y la consola es idéntica. ¿Aquella historia de una PS3 Slim apareciendo de la nada en un mercadillo de Filipinas? Increíble, pero era real.
Parte de este análisis iba a consistir en un despiece total de la máquina para ver lo que escondía en su interior. Sin embargo, el trabajo de iFixit es francamente bueno, y no hace falta que lo repitamos aquí. Hay una gran cantidad de información que podemos extraer de ahí - primero que el ventilador que ha utilizado Sony es el más grande que han visto en iFixit para un aparato de consumo, consumiendo un máximo de 12 voltios y 1,2 amperios, algo a la altura de los ventiladores de los PC's de sobremesa. En segundo lugar, la fuente de alimentación es multi-voltaje (el manual de PS3 Slim sugiere lo contrario), así que importar el modelo americano o japonés no debería suponer ningún problema. La PSU también es interesante en el sentido de que mis cálculos eran correctos y está calificada como de 216 vatios - aunque incluso en el uso más intenso no he notado que consumiese más de 101 vatios. Esto contrasta con la Xbox 360 modelo Jasper, que usa más o menos la misma cantidad de energía, pero con una PSU de 150 vatios.