Dark Souls 3 - A los pies del muro y Gran árbol corrompido por la maldición

Enciende la hoguera y desciende por las escaleras. A tu izquierda hay un cuerpo que puedes saquear, así que recoge el alma y sigue descendiendo. Justo a mitad de camino hay una pequeña repisa a la derecha.

Camina hasta el final de la misma y los perros y zombis de abajo empezarán a luchar unos contra otros, lo que hará que tu trabajo sea un poquito más fácil. Cuando hayan acabado, baja y termina el asunto.

Enciende la hoguera del Asentamiento de no muertos

A la izquierda del gran portón hay una palanca. Actívala y mata al perro que hay detrás, luego adéntrate por el arco. La pequeña cabaña que hay delante y a la derecha contiene la hoguera del Asentamiento de no muertos, así que enciéndela y avanza por la ciudad dilapidada.

En el siguiente edificio encontrarás a varios enemigos veloces que llevan sombreros. Pueden infligirte daño por sangrado y saltar desde bastante distancia, así que es más fácil que te pillen desprevenido - mantente alejado de las esquinas de la habitación siempre que puedas.

Hay un cadáver con objetos colgando del balcón de fuera - golpéalo y podrás recoger el objeto del suelo más tarde. Al girar la esquina en el balcón hay más objetos que saquear custodiados por un espantapájaros.

Cuando el edificio esté despejado sal por el nivel del suelo. A tu izquierda verás un gran grupo de enemigos, pero están todos ocupados, así que ignóralos y avanza por el lado de la derecha.

Gira a la derecha y cruza el puente en el que te encontrarás con dos tipos de espantapájaros que se dirigen hacia ti. Hay otros dos en el edificio de más adelante, y uno más con sombrero se lanzará desde el tejado.

Cuando no haya moros en la costa abre las puertas, sal fuera, recoge los objetos del cadáver que tienes a la derecha y ve por el otro camino cruzando el puente de piedra. Ten cuidado al llegar al otro lado ya que hay dos zombis durmiendo delante de unos barriles explosivos. También hay lanzadores de granadas justo delante, una combinación que puede ser mortal con sorprendente facilidad.

Mata al enemigo que ataca con un cubo

Cuando hayas pasado los barriles te encontrarás con un enemigo grande que lleva un gran cubo de piedra y que tiene la cuestionable afición de estamparlo en cabezas ajenas.

Puedes intentar llevarlo hasta uno de los zombis granaderos para que reviente los barriles mientras él pasa, o acabar con él al estilo tradicional. Asegúrate de que te retiras cuando eleve el cubo por encima de su cabeza, luego haz una finta hacia delante y propínale un par de golpes rápidos tras su ataque.

Atraviesa el arco de madera fuera del alcance de los atacantes de arriba, hacia otro set de escaleras. Mira detrás del edificio a tu izquierda para encontrar más objetos, y luego desciende por las escaleras sin llamar la atención de los enemigos que hay más adelante.

Gira a la derecha y vuelve por el nivel más bajo, luego gira a la derecha para entrar a las alcantarillas. Mata al perro y desciende por la escalera para enfrentarte a otro enemigo típico de los Souls: las ratas gigantes.

Consigue almas en la base del Gran Muro de Lothric

En la neblina hay un par más de estos malditos roedores, y uno todavía más grande te otorgará un Anillo de Sangre. Sube por la escalera de la derecha del lado más lejano, abre la puerta de metal y cruza el puente para encontrar la hoguera del Puente Desvencijado.

A través del arco de piedra roto hay un enemigo pesado que lleva una sierra y que realiza un ataque rápido que puede causarte sangrado. Esquiva su espada y ataca por detrás hasta que la lucha termine.

(Esta es otra buena zona para el farmeo, esto es, para conseguir muchas almas sin demasiado esfuerzo. Puedes conseguir un ratio de unas 600 almas por minuto, además de unos cuantos objetos bastante decentes yendo y viniendo de la hoguera.)

Sobrevive a la zona de las lanzas

Atraviesa el siguiente arco y se acercarán dos enemigos más por delante antes de ser barridos por unas grandes lanzas que aparecen desde la derecha.

Cuando desaparezcan los proyectiles empezarán a ir hacia ti, y tienen un radio de alcance bastante grande - retírate hasta el arco para estar seguro hasta que la cosa se calme. Dirígete a la puerta de nuevo y aparecerán más enemigos.

Da media vuelta y corre, ya que las lanzas también lidiarán con ellos. Cuando no haya nadie apresúrate en llegar hasta la puerta.

Hay un enemigo justo al otro lado, pero esquívalo antes de meterte en pelea, ya que luchar contra él en la puerta te pone en riesgo por las lanzas. Hay un segundo enemigo dentro con el que debes lidiar, además de un daño extra de las mismas lanzas - incluso a través del muro. Mantén la paciencia y las cosas terminarán calmándose.

Sube por las escaleras de la parte trasera de la habitación y ve en línea recta hasta el edificio de delante. La zona de la izquierda contiene la pelea con otro jefe, así que respira hondo...

Cómo matar al Gran árbol corrompido por la maldición

Te enfrentarás a un árbol que tiene una pinta bastante perturbadora en una lucha en varios escenarios y distintas localizaciones.

La mayor parte de sus ataques son pesados o de efecto de zona, así que los escudos no sirven de mucho aquí. Concéntrate en esquivar y causar daño, en su lugar, y lleva armas a dos manos si puedes. Debido al tamaño de este jefe, la forma en qe se mueve y el hecho de que necesitas darle en lugares concretos de su cuerpo, no recomendamos fijar objetivo.

Durante la primera fase solo puedes dañar al jefe dándole en la zona blanca llena de grumos que tiene entre sus piernas, así que mantente fuera de alcance hasta que se siente, luego da una voltereta y dale unas cuantas veces. Sus ataques en este punto serán mayormente elevarse e intentar machacarte si no te apartas rápidamente, y tu amenaza principal viene de los zombis de la zona.

Cuando su barra de salud desciende hasta aproximadamente dos tercios del total, sus bultos empezarán a arder y el centro de la arena colapsará. Si no caes inmediatamente realiza un salto de fe - a pesar de la caída no recibirás ningún daño.

Ahora tiene muchos más bultos blancos en su torso, así que dale unas cuantas veces mientras está arrastrándose. Ahora se puede mover y realiza un montón de ataques de barrido con sus brazos; si consigue agarrarte con su brazo central, es probable que no lo cuentes. Mantente alejado hasta que sea vulnerable.

Cuando su barra de salud esté alrededor del cincuenta por ciento del total deberás concentrarte en los bultos de su espalda. Cuando se siente violentamente se retirará, lo que los dejará a la vista.

A un tercio de su salud es momento de que te centres en sus extremidades - primero su mano izquierda, y luego su codo derecho. Seguirlos es importante, así que mantén la distancia e intenta predecir hacia dónde caerá para que puedes acercarte lo justo.

Cuando acabes con él enciende la hoguera y registra la zona.

En la siguiente página explicamos cómo superar el Camino de los sacrificios y el Sabio de Cristal.

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Regresa a la hoguera del Puente desvencijado, cruza el puente, entra a las alcantarillas y gira a la izquierda. Acaba con las ratas que haya ahí y sube por las escaleras. Habrá un gran número de enemigos patrullando fuera, así que puedes esperar o acabar con ellos antes de cruzar el puente de piedra de más adelante.

Un espantapájaros y tres enemigos pesados están en el otro lado, así que acaba con ellos uno a uno y luego mata a los perros que se esconden tras el edificio en la zona elevada de la derecha. Cuando esté despejado entra en la siguiente zona, habla con la criatura sentada en el muro y avanza por los portones hasta la iglesia.

Cuando entres el ascensor desaparecerá y volverá a aparecer con un tipo vestido de forma bastante excéntrica. Habla con él dos veces para que te cuente toda la historia, y luego sube al ascensor. Hay un único enemigo con armadura muy alto aquí que puede causar daño por congelación además de daño físico.

Cuando lo mates, abre la puerta y entra en el Camino de los sacrificios.